jueves, 12 de julio de 2012

68 AÑOS rescatando la Historia Aeronáutica de Chile


MUSEO NACIONAL AERONÁUTICO Y DEL ESPACIO DE CHILE


En este nuevo Aniversario, el Museo Aeronáutico de Chile, ubicado en la Base Aérea de Los Cerrillos, Pedro Aguirre Cerda N° 5.000, al noroeste de la antiguo Aeródromo del mismo nombre y convertido en un desierto parque; nuevamente se esfuerza por demostrar su validez.

Sergio H. Pulgar N. Investigador Histórico Aeronáutico

RESTAURACIONES y CONSERVACIÓN

Uno de los aspectos más llamativos de éste gran Museo, es el relativo a la recuperación de aeronaves - misión esencial de su existencia -, ya que, a diferencia de otros Museos, éste es AERONÁUTICO y por ende TECNOLÓGICO, y si no se mantiene, preserva y exhibe Aeronaves, qué sentido tendría.
Al respecto, el Museo cumple anualmente con un Programa bastante organizado y ha logrado, en los últimos 6 años, devolver a su estado original de operaciones, un notable número de aviones, tanto civiles, como militares.

 DC-3C de LAN CHILE, magníficamente restaurado.

Si bien cumple con su misión de Aeronáutico Nacional y le dá más importancia a la recuperación de aeronaves civiles - con el consecuente costo -, no es menos cierto que la ciudadanía visitante - razón de existir de un Museo -, lo que más le atrae son las militares, sobre todo las contemporáneas, ya que rara vez tiene acceso, salvo en FIDAE, de conocer y saber acerca de ellas, sobre todo las de combate.

 
 FACH 515, PANTERA, en su último esquema operativo y bastante completo

Es acá donde el Museo ha hecho un gran esfuerzo y tremendo aporte, con una gestión exitosa, al incorporar todos los aviones de caza, ataque y reconocimiento, de más reciente operación a su inventario. De paso ha recuperado el parque de aeronaves que se exhiben en el entorno del edificio de la Fuerza Aérea (Halcón, Dragonfly, Tigre III, Elkan y Pantera).
Sin duda ha cumplido con creces su misión de recuperar y conservar las aeronaves.

FACH 811, TigerII/Tigre III, en un esquema acotado, aunque no logrados los tonos.

A 68 años de su creación, bajo la Dirección del más destacado de los historiadores aeronáuticos, Coronel (A) Enrique Flores Álvarez, su desarrollo ha sido de períodos variables, pero intentando siempre avanzar y crecer, lo cual se ha consolidado desde su traslado a Los Cerrillos, uno de los mayores logros en cuanto a infraestructura, cuyo principal gestor fue su entonces Director, Coronel (A) Mario Jahn Barrera, incansable buscador de medios y elementos históricos y generador de diversas instancias de acercamiento de la ciudadanía a las actividades del Museo, en forma participativa. 
Para Don Mario todo se creaba y producía en función del Museo. Una de sus principales preocupaciones era la integración de la tecnología con la naturaleza y de no haber mediado intereses ajenos y externos al ambiente aeronáutico; tendríamos uno de los Museos y microsistemas de esparcimiento y conocimiento más desarrollados del mundo. La codicia y ambición descontrolada de otros entes abortó un hermoso y grandioso proyecto.
De todas maneras, se logró conservar su medioambiente verde y, aunque ya no tan bien cuidado, se mantiene hasta hoy.
FACH 314, KINGFISHER o V.S. (como se estiló en su paso por la Fuerza Aérea), un gran y logrado trabajo de restauración en uno de sus más notables esquemas (1950)

CENTRO DE INVESTIGACIÓN HISTÓRICA

Desde el lanzamiento de su primer Boletín, la Sección Historia del Museo Aeronáutico, ha ido progresiva y positivamente incentivando y colaborando en forma comprometida con los Investigadores Histórico Aeronáuticos, tanto nacionales, como extranjeros.
La referencia al Boletín tiene su causa en virtud a que fue la primera "exteriorización" de ésta Sección hacia el mundo ajeno a las instituciones aeronáuticas oficiales.
Hasta entonces sólo se relacionaba con el "mundo exterior" a través de una incipiente, aunque de buenas bases, Biblioteca especializada, que ha incluído no solo al mundo aeronáutico, sino también al del coleccionismo militar y maquetismo y modelismo.
Recordada es la agradable y siempre amena recepción de Verónica, Bibliotecaria que marcaba la impronta que actualmente se advierte. Siempre dispuesta a responder las consultas y buscar lo que se le solicitaba, amén de incentivar el desarrollo de actividades externas que se relacionasen con la actividad del Museo.
Hoy la Biblioteca y Archivo del Museo Aeronáutico, sin que sea un eufemismo, goza de una "época dorada", ya que esa buena base inicial, ha permitido incrementar en forma notable las colecciones de publicaciones especializadas, acompañada de una excelente y proactiva atención, tremendamente positiva.
Su actual Bibliotecaria, Flora Piñol, además de cumplir su función profesional, está constantemente apoyando y depurando las ideas de quienes acuden a consultar, ayudando a definir y agilizar la búsqueda de información.
En cuanto al Archivo, misma idea, ágil, de respuesta inmediata y sin inconvenientes, permite acceder a los documentos que han logrado rescatarse del indolente sistema, para reconstruir de la mejor forma los hechos histórico aeronáuticos del pasado.
Respecto de la documentación, sin duda que debería aplicarse la legislación y reglamentación vigente, en cuanto a la incorporación de la referente a los años 90, ya que, Secreta en su momento o no, es parte de la Historia REAL y concreta de una gran Institución, como es la Fuerza Aérea y, del mismo modo que la de la Aeronáutica Civil - bastante más abierta -, debe entender que la AVIACIÓN en sí misma es el resultado de errores y aciertos, que el desarrollo de las actividades de vuelo han sido producto de la fórmula prueba/error, no de la aplicación de conocimientos habidos.
La Aviación genera sus resultados en base a lo que se experimenta, por ende juzgarla o creer que será juzgada por el conocimiento documental de los errores cometidos y por ello no permitir su acceso o simplemente cremarla - amparada en reglamentos operacionales internos correctamente legales -
Larga exposición para decir que si se quiere honestamente contar con una buena Historia Aeronáutica, tanto militar, como civil, se requiere de permitir el acceso a la información que ya ha caducado en sus clasificaciones de seguridad por ser obsoleta.
La única falencia, aunque más como llamado de atención que como crítica, es la generación de espacios positivos de Investigación Histórico Aeronáutica, fomento de la actividad, hasta ahora desarrollada por iniciativa propia y privada, sin ningún tipo de apoyo, salvo el de las excelentes entidades del Museo ya descritas: Biblioteca y Archivo Histórico.

INFRAESTRUCTURA

La gestión del actual Director, General de Aviación (A) Ricardo Gutiérrez Alfaro, no pude clasificarse menos que de notable; ya que enfrentado a diversos cambios en políticas institucionales, reducción de fondos y restricción de su uso dados los nuevos sistemas de administración gubernamentales; ha sido capaz de continuar desarrollando el Museo en cuanto a sus colecciones, exposiciones y restauración de aeronaves.
La única deuda, que sobrepasa a la Dirección del Museo, es la implementación de más infraestructura, dicho en palabras simples, un nuevo Salón de exposición de aeronaves, o en su defecto, el traslado de hangares históricos, que hoy sirven de bodegas, sin siquiera reconocerles su noble y antigua misión de proteger los medios que sirvieron otrora para custodiar los cielos de Chile.
Ejemplo a la vista el hangar de la Escuadrilla Presidencial, luego la cuna del Grupo N° 7 y hasta sus últimos días como tal, del SAF (Servicio Aerofotogramétrico), al oeste del Comando Logístico. Qué decir de los hangares de la primera fábrica de aviones extranjera basada en Chile, gestión del Comodoro Arturo Merino Benítez, los de la Curtiss, al oeste inmediato del Museo.

A estas alturas muchos lectores sonreirán y recordaran que esta es una constante en los análisis histórico operacionales que este Informativo hace del Museo, mas si no se recuerda la imperiosa necesidad y la mantiene en la retina de todos quienes profesan esta atracción por el mundo aeronáutico, la frágil y ocupada mente de todos la olvidará y se contentarán con recorrer un abigarrado Museo, que ya no permite observar o fotografiar adecuadamente cada modelo.

TRANSPORTES HISTÓRICOS

Para cerrar este análisis, la gran deuda, a nivel histórico: los Transportes Aéreos.
Partiendo de la premisa de que, por sus grandes dimensiones resulta difícil ya, hacerlos llegar al Museo en Los Cerrillos, no debe ser razón para su olvido y abandono, hasta su desaparición en las diferentes estaciones en las que se encuentran esos medios fundamentales del sistema aeronáutico.
De su relevancia en el área civil, restan comentarios, son su esencia y razón de existir.
Mas en el área militar son esenciales, simplemente imprescindibles, es más, el desarrollo del vector defensivo y el de la mantención de la soberanía, sobre todo en este largo país, que va desde Arica al Polo Sur.
No han sido los aviones de combate, portentosas naves que se han desarrollado en forma vertiginosa desde los inicios de la aviación chilena, los que le han dado la gloria a la Fuerza Aérea, sino los Transportes. Desde el simple y tosco Junkers F.13, al elegante y lujoso Gulfstream.
El Hércules, ni mucho que decir sobre él, sus innumerables, constantes y permanentes operaciones en todos los horizontes de Chile y el mundo, que está entrando en sus 40 años de servicio nacional.
Si bien el Museo ha logrado rescatar al 99A, C-45 y un C-47, sólo cuenta con un fuselaje sin alas del mítico C-130, en la esperanza que, de concretarse su renovación, se logre conseguir las piezas faltantes para su restauración.
Ya se perdió el DC-6, los Boeing 707, aunque ojalá el sentido histórico institucional, haga el esfuerzo de donar y trasladar el "Águila", para que sea reconocido y admirado por las nuevas generaciones.
Hasta ahora se han hecho denodados esfuerzos, de positivo resultado en la recuperación de un 707 de LAN CHILE - que contará con muchas partes rescatadas del FACH 902 (guillotinado y vendido como chatarra) -, pero nada por los grandes transportes retirados por la Fuerza Aérea.
Un DHC-6, otro notable de la aviación nacional, se encuentra a la entrada de la Tercera Brigada en Puerto Montt, ¿cuánto resistirá sin una adecuada mantención ?, bueno sería que se decidiese su entrega al Museo.
Más y mejor suerte tuvo un DC-3 ex LAN restaurado y decorado con la librea del famoso FACH 960, preservado en el Grupo de Aviación N° 10 de Transporte Estratégico. De paso se recuerda que a nadie le importó saber que el original, aunque deteriorado aun subsiste en su último destino, Chaitén, donde al menos ha sido fotografiado recientemente y que, quizás en un sublime grito de ¡no me olviden!, las lluvias y la acción de los implacables temporales han dejado al descubierto sus colores y la insignia del místico "10".

Deuda a saldar, ojalá las nuevas generaciones de Mando de la Fuerza Aérea, tengan un poco más sentido del valor de la historia, que las palabras "mística" y "reconocimiento histórico", tan recurridas en los discursos, se hagan realidad en acciones en pos de la preservación de la Memoria Histórico Aeronáutica.

CONCLUSIONES

Sin duda falta trabajar en conjunto, falta que se comprenda que la Investigación Histórico Aeronáutica no anda tras los "secretos militares" ni fotografiando con "mala intención" sus aeronaves - prejuicio que no se aplica a los extranjeros, al contrario, se les otorga el máximo de facilidades, sin obstaculizarlos, ni menos humillarlos y maltratarlos con censuras a su material, como ocurrió en el último 21 de Marzo. Sin duda que se entendieron mal las instrucciones del Alto Mando al respecto y de todas formas cuentan con los medios y personal especializado en detectar posibles peligros.

Con todo, la Historia Aeronáutica es una necesidad para las nuevas generaciones, sin pasado no hay presente; las actuales generaciones no son de "generación espontánea", son el fruto de acierto y errores del pasado, pero que al no conocerlos, se repetirán, es el axioma inexorable de la Historia.

 Metafórcamente este viejo "radial" es la base de ese imponente y sobrio edificio, símbolo actual del Poder Aéreo Nacional; que las nuevas generaciones de aviadores no lo olviden ...

Felicidades al Museo Nacional Aeronáutico y del Espacio, en sus 68 años de existencia, felicitaciones a todos sus integrantes por la gran misión que cumplen, no hay duda que hacen bien su trabajo y seguro que lo podrán hacer mejor.

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