martes, 23 de junio de 2015

CHILE - se necesita un "LIFT"


M-346 de ALENIA AERMACCHI ( Italia )

Además de tener una flota de aeronaves de combate de primera línea, una Fuerza Aérea necesita un buen Entrenador avanzado o Lift; con el objetivo de garantizar un mínimo de tiempo en la puesta en servicio operativo de sus nuevas tripulaciones.

Entrenador Avanzado: una tarea pendiente

En Chile, esta misión está asignada al A-36 "TOQUI", una versión avanzada del entrenador C-101/T-36, de larga data en la Fuerza Aérea chilena (1984), al cual se ha unido el AT-29 "SUPER TUCANO", conformando la base de la transición de los "cazadores" para aspirar a volar los F-5E "TIGRE III" y luego los F-16 A/B MLU o C/B50.


Del conocimiento superficial de las operaciones se rescata que, a pesar de la disimetría tecnológica, se logra el objetivo, consiguiendo contar con operadores de aeronaves de primera y segunda línea de combate, sin mayores inconvenientes, incluyendo una baja tasa de incidentes y casi nula de accidentes en el proceso.


Mas el avance tecnológico y las pequeñas, aunque constantes adquisiciones reales de las fuerzas aéreas de la región, obligan a plantearse la interrogante acerca de la necesidad de contar, primero con un entrenador avanzado, realmente avanzado y luego de atender la aplicación de esa aeronave en misiones menores, tales como apoyo de fuego a unidades blindadas o simplemente artilleras; sin aplicar vectores de alto costo operacional y que serían obligados a sacrificar performances en objetivos de baja rentabilidad, con el riesgo que lo acompaña.

En lo específico del entrenamiento avanzado, esto es las prácticas de enfrentamiento aire aire; sin duda que la brecha tecnológica y cronológica más temprano que tarde pasará la cuenta. Ello si se piensa en mantener una eficiencia disuasiva y no un potencial meramente representativo.

¿ Por qué ?

Entre los eventuales adversarios, aunque no cuentan con aeronaves en cantidad equivalente a la chilena, si poseen dos elementos relevantes a considerar; primero la experiencia en combate real (da lo mismo el resultado) y segundo sus aeronaves (aunque numéricamente menores) son de alta performance y cuentan con buena y operativa capacidad de armamento (amén que han demostrado tener la voluntad de invertir en ello).
Otros, aunque nunca han tenido un mejor nivel operativo, tienen a su favor las condiciones geográficas, secundadas por el hecho inapelable que serán "parte de" y no una fuerza ofensiva por sí sola; por lo que atendiendo a sus adquisiciones y reposiciones, se entrenan en ofrecer un componente de apoyo a fuerzas terrestres y reconocimiento aéreo y salvaguarda electrónica.

A la primera consideración, no hay mayores problemas, salvo por la experiencia; más a la segunda, se llega nuevamente al inicio del tema: tener una aeronave capaz de afrontar misiones menores, contra fuerzas dispersas y en distintos frentes a un costo manejable.


Asumiendo la necesidad

Aterrizando en la realidad chilena, aunque la preocupación y los estudios están vigentes, aún no ha sido viable darle curso a solucionar el tema. Solo ha habido cartas de intenciones y visitas profesionales, pero con poco o nada de resultados. Entre estas intenciones, inclusive Rusia ofreció su buen modelo Yak 130, en tanto Corea del Sur nos sorprendió con su TA-50.

Interesante "candidato"

Ahora es la Alenia Aermacchi la que entra en escena, al comunicar que sus entrenadores M346 (del cual conocimos solo una temprana maqueta en Chile), han sido comisionados a una de las principales Unidades de Conversión, dotada de Eurofighter.

Según sus propias estimaciones, los Pilotos Alumnos deberían estar haciendo la transición efectiva en Agosto de este año.

A ver si logramos ver el M346 en acción en FIDAE 2016; sería una buena oportunidad para evaluar sus características positivamente homologadas en su país de origen.




por Sergio Pulgar






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