Vista general de la proa del KINGFISHER, FACH 314, en su nuevo esquema, usado en una de las expediciones antárticas de los años 50
En un esfuerzo loable, de investigación, estudio del original, desmontaje y reconstrucción de piezas y partes, el Museo Nacional Aeronáutico y del Espacio, está logrando la restauración del OS2U-3, en uno de los esquemas más atractivos y meritorios del hidroavión de los 40.
Detalle de la instalación de parte de la quilla del flotador principal
A 67 años del primer vuelo de un avión de la Fuerza Aérea chilena, en los cielos antárticos, es gratificante ver el trabajo de las distintas áreas del Museo Aeronáutico, donde se concentran las misiones históricas y de restauración, amén de un proceso puramente técnico aeronáutico. Con el mismo criterio del mantenimiento de las aeronaves en vuelo del presente, pero con la acusiosidad y fineza de la recuperación de la "personalidad" de la aeronave, que durante muchos años estuvo en deplorable estado en el entonces Grupo Base Aérea de Quintero. De todas maneras, es gracias a esos aviadores visionarios y sencillos, que conforman los servicios de Base Aérea, se puedo conservar este único ejemplar del modelo. Interesante que hayan sido ellos quienes tuvieran la conciencia histórica y no quienes en su momento lo operaron y supieron de su notable aporte a la aviación aeromarítima y en la incipiente exploración antártica de los 40.
Dedicación, Profesionalismo y constancia de las antiguas manos aéreas, mientras, de paso se integran las nuevas generaciones de técnicos aeronáuticos.
Recuperación a su configuración original, de la sección anterior de la carlinga trasera
El esquema se ha investigado profusamente, por lo que aportará nuevos atractivos a esta hermosa y singular aeronave de la segunda guerra mundial.
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